La práctica interior mejora la expresión exterior
¿Cómo puede el enfoque autodirigido de Continuum apoyar el bienestar y la expresión creativa del bailarín?
Mayo, 2021
¿Cómo puede el enfoque autodirigido de Continuum apoyar el bienestar y la expresión creativa de un bailarín?
En las últimas décadas, las prácticas somáticas se han incorporado a los programas de formación en danza. Continuum proporciona a los bailarines una vía para aumentar la conciencia de sí mismos. Con una mayor conciencia de sí mismo, el bailarín es menos propenso a las lesiones. Si un bailarín está fatigado, lesionado o no se encuentra bien, las prácticas de respiración, sonido y movimiento restaurativas de Continuum pueden ayudar a la recuperación. En Continuum, el seguimiento de las sensaciones ayuda al bailarín a descubrir enfoques de movimiento que le resulten favorables, eficaces y libres. Confiar en los propios impulsos internos desarrolla la autoagencia, una habilidad muy necesaria en una profesión que requiere un sentido seguro de sí mismo para tener éxito.
El proceso de Continuum hace hincapié en un vocabulario de movimiento no lineal y fluido que incluye espirales, ondas, curvas y formas serpentinas. Esta forma de moverse puede relajar y aliviar los aspectos repetitivos del entrenamiento de danza y el impacto del sobreesfuerzo en la actuación.
Continuum los sonidos vocalizados alteran los tejidos densos, restringidos y lesionados al amplificar la vibración de los fluidos internos, mejorando así la circulación y fomentando la curación.
Continuum las prácticas de respiración aumentan la capacidad de respirar, la versatilidad de la respiración y la adaptabilidad del sistema respiratorio del bailarín para responder a las necesidades del momento, mejorando así la eficiencia energética.
Aunque las exploraciones de Continuum son secuencias guiadas, hay mucho espacio para la expresión individual del movimiento. Moverse lentamente a partir de la sensación interna potencia el sentido interior del bailarín. Cada uno de los que se mueven en Continuum sigue los impulsos internos de su propio sistema nervioso, de sus propias sensaciones, así como el ritmo adecuado para experimentarse plenamente a sí mismo. Esto lleva a los bailarines a desarrollar la confianza a partir de un íntimo conocimiento interior de sí mismos, más allá de lo que ven en el espejo del estudio de danza. El bailarín se vuelve más transparente como intérprete, capaz de transmitir una amplia gama, desde los matices sutiles hasta la plena expresión exterior.
Cuando los bailarines de Continuum empiezan a saber hacia dónde van, la directriz es reducir la velocidad o hacer una pausa, para sentir más profundamente el "movimiento dentro del movimiento" o incluso cambiar la dirección del movimiento. El objetivo es eliminar los patrones habituales y arraigados, liberando así respuestas nuevas e innovadoras.
Una persona que se mueve en Continuum se despierta a la creatividad inherente a su propia biología. Experimentar directamente los motivos de crecimiento de la vida celular y el desarrollo embriológico en el propio cuerpo en movimiento ofrece nuevos paradigmas para el proceso creativo de hacer danzas.
A medida que crece la conciencia interior, también aumenta notablemente la conciencia de los demás, de la interconexión. Los bailarines crecen en su capacidad de comprender intuitivamente los objetivos del coreógrafo y de trabajar en colaboración con otros bailarines. Los bailarines perfeccionan su capacidad para transmitir el significado y la intención del movimiento al público.
La experiencia interna de Continuum favorece el florecimiento creativo del bailarín al fomentar la autoconciencia, la autoagencia y la inteligencia somática.